La suspensión está hecha en forma de una rueda giratoria: en la cuchilla tallada está grabada la inscripción "madre dulce", estricta y cariñosa al mismo tiempo, como un antiguo atractivo doméstico. Los detalles tallados del estante retorcido y el adorno en la parte inferior enfatizan la silueta familiar de la vida tradicional rusa, transmitida en una miniatura de joyería. Este pequeño adorno recuerda el trabajo de las mujeres, las manos que crean orden y calidez, y esa fuerza silenciosa por la que las madres siempre han sido agradecidas sin más preámbulos. La suspensión se convierte en un signo de respeto, simple y hogareño.